Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo: Introducción, posicionamiento y rivales
Por mucho éxito que tenga un modelo, o precisamente por ello, es preciso renovarlo periódicamente con el paso del tiempo. Alguno pensará que, en el caso de una 125 custom, es menos necesario, pues los postulados estéticos custom son perennes.
Siendo esto incluso discutible, el mercado 125 es muy dinámico. De eso saben en Macbor y no han querido dejar pasar la oportunidad para renovar su Rockster 125 que tan bien les funciona comercialmente, pues es el modelo de la marca que más se vende.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Que su estética sea conservadora no quiere decir que a los que no les gustan las deportivas tampoco quieran disfrutar de aceleraciones y velocidad punta decentes. En Macbor, que son gente de moto, lo saben. Diseñadas en Barcelona y fabricadas en China, las Macbor Rockster 125 Evo (12,2 CV, 2.499 €) y Rockster 125 Flat Evo (12,2 CV, 2.599 €) comparten chasis y motor -la ficha técnica- para diferenciarse en aspectos estilísticos y ergonómicos.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Rivales no les faltan en el proceloso mundo del 125. En general, se trata de modelos que no se centran tanto en el factor precio, para lo que ya tienen otros modelos en catálogo. Ahí están modelos como la Cyclone RA125 Plus (15 CV, 3.090 €), QJ SRV 125 (13,6 CV, 3.899 €), o la Zontes 125C (15 CV, 3.087 €), que superan en todos los casos la barrera de los 3.000 €. Ahí es donde las Rockster 125 ven hueco, pues sus prestaciones están a la altura -si es que no son mejores- que las de sus rivales.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo: Características técnicas
Macbor ha seguido su propio camino, el de la relación peso/potencia, para conseguir una muy buena relación prestaciones/precio en ambas versiones. Quizá no sea la más potente entre sus rivales, pero sí que es la más ligera. Con un peso de 147 kilos en orden de marcha, le bastan 12,2 CV a 9.500 rpm para disfrutar de prestaciones de primer orden.
De hecho, el aumento de potencia respecto a la anterior versión es de un 28% y eso se nota. También es buena la cifra de par máximo, 9,9 Nm a 8.000 rpm, lo que nos indica que el empuje máximo está en la parte alta del cuentavueltas. Pero eso no quiere decir que el motor no sea elástico. Es más, es capaz de rodar en ciudad a muy baja velocidad a bajas vueltas, sin atragantarse y saliendo con soltura.
El motor es un sencillo monocilíndrico de 4 válvulas, refrigerado por aire y fabricado por Zonsen, el mayor fabricante de motos de China. Si te preguntas por qué Macbor no recurre a la refrigeración líquida -que también está en el catálogo de Zonsen-, la respuesta está en los mercados internacionales.
Macbor es una marca internacional y diseña sus productos de modo que se puedan comercializar en diferentes países. Eso incluye diferentes tratamientos fiscales según mercados y el monocilíndrico que equipa a la Rockster es compatible con otras cilindradas: 150, 200 y 230 cm3; esto permite a la firma española beneficiarse de las economías de escala y poder ofrecer una moto como la Rockster 125 Evo a un precio tan atractivo. No pudimos constatar el consumo, pero no puede ser mucho
A lo largo de la ruta de 115 kilómetros no se movió el indicador de combustible, entre otras cosas porque el depósito es de nada menos que 13,5 litros. A poco que el consumo se acerque a 3l/100 km, más que probable, la autonomía superará con creces los 400 kilómetros.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
La parte ciclo es sencilla, pero eficaz. Los frenos consisten en un disco delantero de 267 mm con pinza flotante de dos pistones. El disco trasero es de 240 mm, también mordido por pinza flotante de dos pistones. La frenada combinada ha evolucionado a un ABS de doble canal.
La horquilla delantera es convencional, con 37 mm de diámetro y 137 mm de recorrido. En el tren trasero se recurre al clásico doble amortiguador tipo piggyback con regulación en precarga.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Mención especial a los neumáticos CST de apariencia scrambler, pero que mostraron un magnífico rendimiento, incluso en conducción deportiva. En ambas versiones son medidas 100/90-18 para la rueda delantera y 130/90-15 para la trasera, siempre en llantas de radios.
La distancia entre ejes queda fijada en 1.415 mm, la altura de los asientos al suelo en 730 mm y el peso en 147 kg en orden de marcha, también para las dos versiones. La iluminación es full LED y la instrumentación se compone de un reloj redondo con pantalla LCD que recuerda al de las Ducati Scrambler.
La información que contiene es muy completa e incluye velocidad, cuentarrevoluciones, indicador de marcha engranada -muy importante para los que es su primera moto-, hora, nivel de combustible, odómetro, voltaje y testigo de ABS. Salvo las revoluciones, toda la información es fácilmente legible con un golpe de vista.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Hasta aquí, ambos modelos comparten todo lo expuesto. Como todas las Macbor, está diseñada con atención al detalle y presenta elementos de calidad que se harán patentes en el comportamiento dinámico. Las diferencias entre la Macbor Rockster 125 Evo y la Rockster Flat 125 Evo se reducen a elementos de diseño que también se traducen en diferencias ergonómicas.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
La Macbor Rockster 125 Evo tiene un estilo más cruiser, que se refleja en elementos como el manillar “cuerno de vaca”, más ancho y más alto, mientras que la Rockster Flat 125 Evo tiene un manillar más plano y bajo.
El apellido Flat le viene por el asiento de apariencia más plana al llevar siderar, mientras que su hermana lleva un respaldo para pasajero tipo “Easy Rider”. Por último, las estriberas son redondas en la Rockster Flat 125 Evo, mientras que en la Rockster 125 Evo se recurre a plataformas planas.
Así, la postura de ésta última es más cruiser y apropiada para largos trayectos, mientras que la Rockster Flat 125 Evo es más “deportiva”, si bien ambas comparten muy buenas cualidades dinámicas, como podrás descubrir si sigues leyendo.
Además de los elementos diferenciales (manillar, asiento y estriberas) se pueden diferenciar en el color. La Rockster 125 Evo está disponible por 2.499 € en Negro, Rojo y Gilver -color champán, para entendernos-, mientras que la Rockster 125 Flat Evo se presenta, por 2.599 € en Negro Mate, amarillo y Verde.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo: Cómo van las Macbor Rockster 125
Estábamos advertidos de que la ruta escogida por el equipo de Macbor iba a ser muy bonita y, como suele ser habitual en la marca, cañera. Al fin y al cabo, es lo que me gusta, porque para probar cualquier moto, aunque sea custom o cruiser, preciso comprobar todo extremo en cuanto a su comportamiento dinámico, de modo que pueda detectar si está capacitada para lo que ha sido diseñada, o incluso, para algo más.
Parece ser que este es el caso, pero yo no lo intuía a primera hora de la mañana, antes de subir a las motos. Al llegar de los primeros a la recepción del hotel desde el que partía la ruta, pude elegir con qué versión empezar. Sabía que los primeros compases serían urbanos o semiurbanos, así que por aquello de ir de menos a más, opté por empezar con la versión cruiser, la Rockster 125 Evo, convencido de que rozaría enseguida con las plataformas.
Cuál fue mi sorpresa cuando nada más salir del hotel, al llegar a la primera rotonda con intención de rozar, no conseguí hacerlo. Primera sorpresa positiva. La posición de conducción no puede ser más cómoda. Aunque elevado el manillar y separadas sus puntas, las manos caen en posición natural. El asiento es confortable y las plataformas, también. El único inconveniente es que para accionar el freno trasero hay que levantar el pie de la plataforma sí o sí.
Con la palanca del cambio depende: en casi todas las unidades debía levantar el pie de la plataforma para subir una marcha, ciertamente molesto, como si mi pie fuera pequeño. Pero descubrí una unidad cuya palanca había sido ajustada a un “queso” de mi tamaño, es decir, la palanca es ajustable, pero también muy conveniente tomarse la molestia de ponerla a tu tamaño.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
En territorio urbano es capaz de circular a baja velocidad sin ser obligatorio llevarla alta de vueltas. Al salir a carretera, compruebo que el sonido es sugerente y que el empuje acompaña al sonido. Aquí sí hay que subirla de vueltas.
El desarrollo es muy adecuado, salvo el salto entre 2ª y 3ª, demasiado acusado en las carreteras muy sinuosas, en las que la 2ª se muestra muy revolucionada y la 3ª cae por debajo del medio régimen, lejos del punto de empuje máximo, sito en el último tercio del cuentavueltas. Cito el último tercio, porque en conducción deportiva no es fácil leer a qué régimen se circula; las cifras del tacómetro son muy pequeñas y es conveniente tener la atención en otros menesteres.
¿He dicho conducción deportiva? Sí, la Macbor Rockster 125 Evo hace honor a su nombre y tiene rock n´roll. La rueda delantera transmite confianza, en parte por el buen tarado de la sencilla horquilla, en parte por las geometrías, en parte por los magníficos neumáticos CST de aspecto scrambler (no pone el modelo), de un agarre extraordinario en asfalto seco, semi taco mediante.
Pronto te ves entrando en las curvas a más velocidad de la que esperas y abriendo gas inclemente antes de lo que te imaginas. En esas condiciones y en pleno apoyo sí que rozan las estriberas, pero es más escandaloso el ruido que hacen que la sensación al rascar, que se percibe suave, a modo de educado avisador.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Al cambiar a la Rockster 125 Flat Evo, las sensaciones son las mismas. A nivel motor y chasis rinden lo mismo. La diferencia estriba en la posición de conducción, en la que el manillar está más lejos y más bajo. Lo cierto es que las estriberas cilíndricas de la Flat tardan más en rozar, pero personalmente me gusta más la posición de conducción de la Rockster 125 Evo, más relajada pero igualmente eficaz.
Al final es una cuestión subjetiva. Ambas precisan velocidad en curva, dejarlas correr, para no perder inercia y aprovechar los 12,2 CV al límite, siempre teniendo en cuenta que es inevitable sentir cierto movimiento en el tren trasero en los giros más rápidos, los amortiguadores tipo piggyback tampoco pueden hacer milagros.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Hacer valer su ligereza es su mayor baza y a su vez, la mayor diversión. También porque el freno delantero no es el lápiz más afilado del estuche. Algunas unidades frenaban mejor que otras, todas las motos estaban poco rodadas, pero no le vendría mal unas pastillas más blandas o un conjunto disco/pinza más ambicioso.
Cumple su trabajo, pero se percibe falto de mordiente. Afortunadamente, el freno trasero es fantástico y con la combinación de ambos disfrutarás a dos carrillos, pero siempre sabiendo que aprenderás a usar ambos frenos a la vez.
Prueba Macbor Rockster 125 Evo/Rockster Flat 125 Evo
Otra cosa que sorprende es el ritmo de crucero que permite el monocilíndrico. Es capaz de rodar por carreteras nacionales con toda soltura. Al ser el límite de velocidad de dichas carreteras de 90 km/h, dispone de reserva de aceleración y potencia, porque es capaz de llegar a 120 km/h en 5ª. Lo más curioso es que me sorprendí más de una vez buscando la 6ª que no tiene: no va larga de desarrollo.
Al terminar la jornada, me quedó el regusto de dos motos bien hechas y disfrutonas, que dan mucho más de lo que se puede esperar por 2.499 € (2.599 € la Flat) en un envoltorio bien bonito. A lo mejor te fijaste en ellas por lo pintonas que son, pero te aseguro que la sorpresa va por dentro.
