España
es el país donde más fácil, y mejor, se conduce en todo Europa. Es la curiosa y aventurada conclusión de un estudio reciente que ha situado al país por delante de naciones como
Francia y Noruega. El informe elaborado por la plataforma de alquiler DiscoverCars.com ha evaluado la calidad de la experiencia al volante en
26 países europeos a partir de factores como la inversión en carreteras, la
densidad de tráfico, la señalización, el número de gasolineras y la
disponibilidad de aparcamientos.
España obtuvo 95
puntos de 130 posibles, liderando el ranking gracias a sus más de 16.000 estaciones
de servicio, una inversión per cápita de 230 euros en carreteras y una amplia
red de aparcamientos públicos (cerca de 10.000). A pesar de contar con 34 millones de vehículos
en circulación, el informe destaca la buena planificación de las
infraestructuras viales que facilita la conducción y señala que en otra clasificación reciente, los clientes de la compañía habían situado España como el cuarto país más fácil de navegar por la carretera.
Los 10 países donde es más fácil conducirDiscovercars.com
En segunda posición aparece Francia, con 86 puntos, reconocida por su abundancia de aparcamientos y estaciones de servicio. Le sigue Noruega, con 82 puntos, que se beneficia de la mayor inversión per cápita en carreteras de toda Europa y un tráfico menos denso. Huelga decir que el ranking adolece, probablemente, de cierto sobrepeso en las categorías de gasolineras y parkings públicos, y que su método científico es más que dudoso.
Otros países bien valorados son Reino Unido, Países Bajos y Finlandia, con 79 puntos, así como Austria, que alcanzó los 78. El estudio subraya que cada país tiene ventajas propias, ya sea la claridad de la señalización, la calidad del asfaltado o la menor saturación de tráfico. Estas son las conclusiones enteras, que no terminan de desvanecer claramente si hablamos de un mito o una realidad contrastada y respaldada por datos relevantes.
La empresa de alquiler recuerda además a los conductores que viajen al extranjero la importancia de conocer las normas locales, los límites de velocidad y la documentación necesaria, como el permiso internacional de conducción, para evitar problemas durante sus desplazamientos. Una cosa está clara, los paisajes y carreteras de España, y solo hace falta echar un vistazo ahí fuera, son de los más bonitos que hay en todo el mundo. Solo con eso, podemos concluir que el país es uno de los mejores para conducir, aunque eso no signifique estrictamente que es el mejor.
