la caída inesperada de la startup Damon Inc, que iba a revolucionar la moto eléctrica

Damon Inc se acerca al abismo con un sinfín de demandas, entre ellas las de su fundador
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Cuando conocimos Damon Motors, ahora Damon Inc., daba la sensación de que estábamos ante un posible hito en la historia de la movilidad eléctrica. Prometían una superbike futurista, capaz de alcanzar 200 millas por hora y con 200 millas de autonomía (321 kilómetros).  Lógicamente generaron expectación, por un lado, y fueron capaces de atraer mucho dinero en inversiones.

Sin embargo, el presente de la compañía canadiense es muy diferente: apenas cuenta con once empleados a tiempo completo, acumula deudas, no tiene calendario de producción y se encuentra inmersa en varios procesos judiciales que amenazan su supervivencia.

Los problemas se multiplican y las demandas también. Por un lado, está la empresa arrendadora que denuncia por impagos del alquiler, también tienen la del inversor Andy DeFrancesco y todavía más notable es la de Jay Giraud, cofundador y CEO de la empresa.

Giraud cuenta que fue forzado a dimitir bajo presión, con cuatro horas de preaviso y ante amenazas sobre un despido injustificado. Según su versión, aceptó un acuerdo de indemnización apresurado y sin asesoramiento legal, que ahora reclama como incompleto al exigir salarios atrasados y bonos pendientes. La compañía, por su parte, ha respondido con un contundente “negamos todas y cada una de las acusaciones”.

Lo que un día fueron fotos y sonrisas ahora son preocupaciones y dudas

La situación se complica aún más por una carta que el propio Giraud aportó como prueba en su demanda y que, sin embargo, deja en entredicho su gestión. Firmada por Andy DeFrancesco y otros accionistas, el documento lo acusa de despilfarrar cerca de 75 millones de dólares sin resultados, de falsear el avance de los proyectos, de forzar la salida a bolsa de la compañía de manera irresponsable y de incurrir en nepotismo al nombrar a su pareja para un cargo ejecutivo con un alto salario. Incluso se le reprocha haber comprometido fondos sin aprobación del consejo y haberse beneficiado personalmente de recursos corporativos. El tono de la carta no deja espacio a dudas: si Giraud intenta reclamar más dinero, se emprenderán acciones legales contra él.

Que fuera el propio fundador quien incluyera esa carta en el proceso judicial ha sorprendido a muchos, y ha reavivado las críticas de antiguos empleados que describen su gestión como caótica y caprichosa. Entre ellas, el rápido ascenso de su prometida dentro de la empresa y la falta de transparencia en el uso de las inversiones. Giraud, en cambio, sostiene que la carta se difundió ampliamente para dañar su reputación y dificultarle encontrar empleo o levantar capital en el futuro.

El futuro de Damon Inc. es bastante incierto, siendo optimistas…

La moto llegó a rodar, al menos eso parecía en las fotos

Mientras tanto, la realidad de Damon Inc. se deteriora y el abismo parece abrirse bajo sus cimientos. Con apenas una decena de trabajadores, la mitad de ellos en puestos ejecutivos, sin ingresos importantes, y sin una hoja de ruta clara para su esperada moto estrella, la compañía parece más cerca del colapso que de cumplir las expectativas que generó hace tan poco tiempo. Su futuro inmediato dependerá de lo que se decida en los tribunales, y de si es capaz de reestructurarse antes de que la presión financiera la hunda por completo.

Los compañeros de RideApart, el medio que destapó la situación, afirman que han intentado obtener una declaración oficial de la empresa, aunque sin éxito. Hasta entonces, lo único seguro es que la que iba a ser una de las startups más prometedoras del mundo de la moto eléctrica vive sus días más críticos, en un segmento que no termina de encontrar su sitio.