El regreso de BSA al primer plano de la actualidad está siendo diferente a lo esperado. Mientras muchos rivales están apostando abiertamente por la electrificación, la firma de origen británico y propiedad india ha decidido apostar por una fórmula más conservadora: un catálogo reducido y bien definido.
La reciente Bantam 350, con su motor monocilíndrico de 334 cc, parece estar validando la estrategia, convirtiéndose en un auténtico fenómeno en el mercado británico. En apenas un mes, los concesionarios de Reino Unido han recibido más de 600 pedidos de este modelo, cifra que contrasta con el escepticismo inicial hacia una marca que llevaba décadas fuera del escaparate.
La Bantam está siendo un éxito de ventas
El precio competitivo, su motor sencillo y la conexión con la herencia clásica han servido para que la Bantam compita en territorio británico directamente con la Royal Enfield Classic 350 y la Honda GB350, ambas referencias en el segmento. Lejos de ampliar de golpe su gama, BSA se apoya en un tridente formado por la Gold Star 652, la Scrambler y la mencionada Bantam. Tres motos distintas, pero que tienen la misma finalidad: reintroducir la marca en el mercado tanto local como del resto de Europa.
BSA tiene su eléctrica lista, pero guardada en la recámara
Que BSA ya tenga una moto eléctrica desarrollada es un hecho confirmado por sus responsables. Sin embargo, aseguran que no es el momento adecuado para lanzarla. Según Anupam Thareja, cofundador de Classic Legends, “estar preparados para lo eléctrico es obligatorio, pero el mercado todavía no lo está”. La idea es esperar a que la demanda real crezca y evitar depender de subsidios o compromisos en materia de baterías.
El concepto de moto clásica y prestaciones actuales está funcionando muy bien a BSA
La decisión contrasta, por ejemplo, con la de Royal Enfield, que ya ha puesto fecha a su primera plataforma eléctrica, prevista para 2026 con la colaboración de Stark Future. También es diferente del referente británico: Triumph, que ha multiplicado las variantes de su TR-Series 400 sobre una misma base técnica, alcanzando un gran éxito de ventas en el Reino Unido.
La buena acogida en el mercado local parece, por las cifras expuestas, todo un éxito. BSA ya cuenta con 40 concesionarios operativos en Reino Unido y espera ampliar pronto la red hasta 50. BSA está viviendo una vuelta a la vida en la que la nostalgia tendrá algo que decir, pero también el precio ajustado y una estética clásica modernizada. Habrá que estar atentos a los próximos pasos de uno de los grandes nombres de la historia de las dos ruedas y su renacer.
